Metódica, analítica, objetiva… sensible, apasionada, sin límites…
Mi constante es poner todo en orden, la música, los libros, los estantes de la alacena, las cosas que escribo, los souvenirs de mis viajes, acomodar los cojines de los sillones, que todo combine perfectamente, las tapas de los topers, los productos en el baño, la bolsa y los zapatos, la pijama, separar en carpetas documentos académicos, documentos sobre cuentas bancarias, documentos literarios, documentos que debo leer, documentos que son importantes. Llevar una agenda, en el teléfono, en papel, tener un calendario y marcarlo, con fechas importantes, fechas que no debo olvidar, fechas de citas y compromisos. Hacer listas, listas del super, de cosas que debo hacer antes de morir, de libros, de lugares, de frases, de palabras, de cosas que me gustan, de personas importantes, de películas, de autores, de música. Llevar un presupuesto, ahorrar al menos el 10 % de mis ingresos mensuales, pagar puntualmente, guardar los recibos, revisar los estados de cuenta, hacer mi planeación financiera.
Organizar el tiempo, aprovecharlo, si vas en el carro escuchar la música que debes ordenar o practicar el ingles o el portugués, si hay que esperar llevar un libro, leer en el celular si es necesario, hablarle a una amiga a la que no has visto desde hace tiempo, exprimir el tiempo…
Pensar, analizar, darle vueltas a cualquier cosa, buscar alternativas, crear los diferentes escenarios, pros y contras, respirar hondo, darle la vuelta a las cosas, verlas por todos lados… finalmente: decidirse…
Y entonces soltar amarras, abrir los ojos, abrir las manos, vivirlo todo, intensamente, llorarlo todo, amarlo todo, aprenderlo todo, no quedarse con nada en la mochila, aventarse al abismo de una mirada, desaparecer completamente en unos brazos, decir que tengo ganas o que no las tengo, dar patadas, brinquitos, quedarme quieta, inmóvil, morirme en un instante, en un atardecer, detenerme a seguir el trayecto de una nube, rozar con los dedos el pistilo de las flores, robarme el aroma de un cuello, tatuar en mis dedos la textura de una piel, seguir la mágica ruta de los lunares de una espalda….
Vivirle, vivirme…
hasta desfallecer…
JD